En el área de rehabilitación de Ecuaquem se brinda tratamiento psicológico y motor para los pacientes que han sufrido de lesiones causadas por quemaduras.
Tenía apenas 15 años cuando un accidente le lesionó la mano izquierda al punto de que por poco se la amputan.
Es la historia de Kevin, un joven guayaquileño que a fines del año pasado soportó la explosión de cinco camaretas en una de las manos.
Mariana García, abuela del adolescente, desconsolada acudió a varias casas de salud para que su nieto fuera atendido. “Fue terrible, la única opción que daban los doctores era amputar”, contó.
Un par de días después, unos amigos de la abuela le recomendaron acudir a la Fundación Ecuatoriana de Quemaduras (Ecuaquem). “Fue una luz en el camino, yo vi la salvación en Ecuaquem”, agregó.
Este centro, ubicado en la ciudadela La Herradura, solar 7, en la avenida Agustín Freire entre av. Francisco de Orellana y av. Juan Tanca Marengo, acogió al joven herido y le brindó el tratamiento necesario para salvarle la mano.
Hoy, después de siete meses y de tres intervenciones quirúrgicas, la pesadilla de Kevin acabó. Este joven se encuentra recuperado.
Este es solo uno de los 50 casos que Ecuaquem ha tratado desde su apertura y en los que ha logrado la rehabilitación total de los pacientes.
Este es el primer centro en Guayaquil que se especializa en la atención y rehabilitación ambulatoria de pacientes con quemaduras leves, intermedias y graves.
Carlos Márquez, presidente de la institución, dijo que la principal labor del ente es ayudar a las personas que no poseen suficientes recursos como para solventar los elevados gastos que genera la curación de una quemadura.
Las instalaciones donde funcionan fueron construidas por la Teletón 2010 del Municipio de Guayaquil, por ser una entidad sin fines de lucro.
Los tratamientos médicos cuestan $ 25 cuando el promedio en otros sitios es $ 75, también se hacen descuentos en farmacia.
Como en el caso de Josué, de 2 años, quien hace siete meses sufrió quemaduras en una de las manos a causa de una descarga eléctrica. “Aquí la curación me salió a $ 10, en otros lugares estaba más caro y las consultas cobraban aparte”, expresó la abuela, Patricia Ortiz.
Carlos Márquez cuenta que crear la Fundación de Quemaduras les tomó 11 años. “Este era un proyecto que ya teníamos tiempo planeándolo… Varias veces pedimos apoyo y al fin fuimos escuchados”, señaló.
Esta institución se inauguró el 29 de noviembre del 2010. Y en el poco tiempo que lleva funcionando ya cuenta con áreas de rehabilitación, de curaciones, de consulta y de capacitación a la comunidad. El equipo de trabajo lo conforman 20 voluntarias.
Priscilla Alcócer, directora médica de Ecuaquem, especialista en cirugía reconstructiva, anunció que próximamente Ecuaquem contará con un área de intervenciones quirúrgicas.
Actualmente se opera en la clínica Kennedy. Los casos más complicados se intervienen gratuitamente, con dinero del Municipio.
