"La vida es una lucha continua y hay que valorar cada momento. Debemos vivir tratando de ser felices y buscar conseguir nuestros sueños, pero siempre orgullosos de nuestras raíces y nuestra historia".
“Desde muy pequeña jugaba con mis amigas y mis primas a ser reinas y que modelábamos en pasarelas”, recuerda con alegría la representante de Pichincha, para quien ser Miss Ecuador es un sueño que tuvo en su infancia.
A sus 25 años ya ha culminado sus estudios universitarios en Ingeniería Agropecuaria en la Universidad Politécnica del Ejército, en la facultad IASA.
Entre sus pasatiempos favoritos está leer literatura latinoamericana, escuchar música, pasear con su mascota, ir al cine y practicar deporte.
Recalca que ama a su país, pero uno de sus lugares preferidos para visitar es la ciudad de Santo Domingo de los Tsáchilas, puesto que es la ciudad donde nació su madre y “donde desde muy pequeña he pasado momentos memorables”.
Lo que más resalta es que a más de albergar la ciudad capital donde nació, cuenta con un sinnúmero de lugares que la hacen diversa y única. “Tenemos elevaciones como el Guagua Pichincha, santuarios de mariposas y diversidad en flora y fauna, la ciudad de Machachi, denominada también la ciudad de la ruta de los volcanes, centro principal de producción láctea, entre otros”, menciona Londoño.
Además le gustan del país los lugares donde se pueda sentir la naturaleza y el campo.
Afirma que sería una impulsadora de los sectores turístico y productivo, pero de una manera “productivamente turística”, señala Estefy.
Se describe como una persona con virtudes y defectos, que trata de ser honesta, alegre, responsable y respetuosa. “Me gusta la gente que es directa pero sutil y cariñosa. El respeto es algo primordial para mí en una relación de cualquier tipo”.
Sobre lo que le molesta de la sociedad ecuatoriana señala la falta de conciencia ambiental.
“Somos una sociedad que debería tomar conciencia de que nuestro planeta está atravesando procesos de cambios, los cuales son bastante perceptibles”, señala Londoño.
A futuro se visualiza como una mujer realizada profesionalmente.
