"La unión de todos los ecuatorianos nos hace fuertes ante la adversidad".
Soy de Guayaquil y lo que más me gusta de mi provincia es su gente trabajadora y emprendedora. No en vano en una las canciones insignes de esta ciudad se nos denomina guayaquileños madera de guerrero. Mi plato típico favorito es la guatita.
De mi niñez, puedo contar sobre la primera vez que mis padres me escucharon cantar en un escenario, cuando tenía 8 años. Fue desde entonces que decidieron apoyarme e inscribirme en mi primera escuela de canto. Gracias a ellos, ahora soy cantante profesional.
Como Miss Ecuador, trabajaría junto a la organización en las obras que me sean asignadas, por supuesto. Pero en lo personal, me enfocaría en ayudar a los niños, jóvenes y adultos mayores que padecen de insuficiencia renal y se encuentran en los procesos de diálisis.
“La Vida es Bella”, una película muy motivadora. Es la historia de un padre y un hijo que se encuentra en campo de concentración nazi y a pesar de las terribles circunstancias le enseñó a su hijo que la vida vale la pena vivirla. Es una gran lección para sobrellevar la adversidad, que sin duda me marcó.