Latidos de Guayaquil

Antes eran los chicos rudos, ahora son motivo de admiración. Los harlistas de Guayaquil, una hermandad que se mueve por la afición a las motocicletas y el disfrute de la aventura y la libertad.

El interés por coleccionar historietas o figuras de acción llegó, en algunos casos, a través de sus padres o por el gusto que tuvieron hacia algún cómic durante su niñez.

Guayaquil, la ciudad con mayor número de habitantes y con gran congestión vehicular, encuentra espacios donde el ruido exterior cesa y se busca también calmar el ruido interno. Esta práctica milenaria crece.

No creen en la divinidad de un ser. Se inspiran y ven en la naturaleza el origen del ser humano y todo lo que lo rodea y toman como base el humanismo y la ciencia.

Jóvenes y adultos escalan montañas, se lanzan en paracaídas o vuelan en parapente. Es un estilo de vida que genera seguridad y superación.

En Guayaquil cada día hay más personas que hacen ciclismo como deporte y otros que utilizan este medio para dirigirse a sus trabajos.

“¿Cuándo te casas?”, “cuidado te quedas en la percha”, “soltero maduro…”, estas son solo algunas de las cosas que recurrentemente les suelen decir a las personas que ya pasaron de los 30 años y que aún no han cumplido con lo que la mayoría hace pasados los 20 años, que es casarse y tener hijos.

Sentir sus latidos, sus pataditas y sus movimientos dentro de ti. Sentir que en tu vida hay otra vida que va creciendo, abriéndose espacio. Imaginar su rostro, sus manitos, sus pies; querer tocarlo, abrazarlo, sentirlo, hasta ya no saber quién depende de quién. Es el despertar a un sentimiento desconocido hasta ese momento, y descubrirte mamá.

En el mundo existen varias maneras de viajar, pero algunos prefieren la aventura y se lanzan al mundo, toman un bus, tren o simplemente “hacen dedo”, para emprender el viaje en el que recorrerán distancias extensas, todo para sentir la adrenalina de vivir nuevas experiencias, difrutar de distintas culturas y compartir con la gente.

La distancia para correr no importa si el objetivo es tener buena salud. Y mucho mejor si la competencia es por algún motivo especial.