Nuevo teatro aviva el arte

Con música nacional se abre, por primera vez, el telón del Teatro Sánchez Aguilar (TSA), ubicado en el kilómetro 1,5 de la avenida Samborondón. La Orquesta Sinfónica de Guayaquil, dirigida por el maestro David Harutyunyan, es parte de la gala de iniciación, que también cuenta con las actuaciones de Astrid Achi, Pamela Cortez, Israel Maldonado, Lucho Silva, entre otros.

Este centro cultural, que se inaugura luego de 18 meses de construcción, cuenta con una sala principal, con capacidad para 952 personas, y con la sala Zaruma, que alberga 150 espectadores.

Una programación constante, de espectáculos nacionales e internacionales, con funciones todas las semanas, es la que promete este teatro, que tiene como director artístico al español Ramón Barranco.

Entre los montajes internacionales más destacados que constan en su agenda figuran Las variaciones de Giacomo, ópera protagonizada por el director y actor John Malkovich; el espectáculo del Ballet Flamenco de Andalucía; el circo de Fulanos, montado por la compañía de teatro argentina La Arena; los conciertos de la violinista Hillary Hann y de la soprano Renée Fleming, y la danza del Ballet de Montreal.

Pero la apertura de esta sala, según directores de teatro y actores como Jaime Tamariz, Marina Salvarezza y Hugo Avilés, también es uno de los factores determinantes en el aumento de la oferta de teatro local.

Algunas de las obras que se montan son Frankenstein, de Tamariz, con siete funciones; Ensayo sobre la soledad, de Muégano Teatro, con seis, y Sueños, interpretada por niños con capacidades especiales. Además, se presentan conciertos de grupos y cantantes nuevos, como los de Vam Jazz Quartet, Guayabera Blues Band y Sofía Nietto. Y recitales de oralidad, como los que forman parte del festival Un cerro de cuentos, que incluye narradores extranjeros.

Hugo Avilés, director de Fantoche, considera que el TSA pone en competencia al Teatro Centro de Arte, que con un nuevo eslogan -‘El teatro de la ciudad’- también incursiona en la oferta de una programación incesante. Además, pasa a convertirse en coproductora y pone en escena propuestas de nuevos directores y actores, aumentando la agenda teatral de Guayaquil.